Esto, a pesar de que en abril, Hacienda hizo un aporte extraordinario de $131 mil millones para rebajar los pasivos. La Ministra de Salud, Carmen Castillo reconoció que será "inevitable" una nueva inyección de recursos para disminuir a deuda hospitalaria.

Como existe consenso en que el presupuesto de los hospitales es insuficiente, es costumbre que estos deban dinero a sus proveedores. Estos últimos, para resguardarse de esta situación, suben los precios de sus productos, porque aseguran que más que una venta, los hospitales hacen la solicitud de un crédito.

Como el aumento de precios provoca más gasto para los hospitales, estos hacen crecer su déficit operacional, hasta que no pueden seguir comprando o los proveedores deciden no seguir distribuyéndoles. Ahí es donde se afecta directamente a los pacientes, que por esta dinámica pueden dejar de ser atendidos a tiempo o pasar a las listas de espera, que hoy suman 1,8 millones de personas.

Pero pese a los esfuerzos hechos para contener la deuda hospitalaria, esta no cede y a julio ha superado los $223 mil millones, según consigna "El Mercurio".

Ello, incluso después de que conocidos los resultados del primer trimestre de este año -cuando la deuda llegó a $234 mil millones-, en abril el Ministerio de Hacienda entregó un aporte extraordinario de $131 mil millones para reducir el endeudamiento de los hospitales.

Y es que la deuda siguió creciendo a un ritmo de 20% mensual. Según un análisis hecho por Libertad y Desarrollo, esa velocidad de endeudamiento es el doble de lo que se registró el año pasado, cuando crecía 10% cada mes.

En el centro de estudios aseguran que si se compara julio de este año con igual mes de 2015, incluyendo los aportes extraordinarios en ambos años, en 2016 ha habido un incremento de la deuda. "Considerando los aportes de Hacienda, estamos hablando de $313.718 millones el año pasado, contra $354.512 millones este año", detallan.

Imposible llegar a cero con esta deuda hospitalaria

La subsecretaria de Redes Asistenciales, Gisela Alarcón, señaló que "nosotros nunca hemos comprometido deuda cero porque sabemos que hay un déficit estructural, que implica tener siempre un gasto operacional sobre los ingresos, más aún cuando tenemos hospitales nuevos, estamos inyectando más médicos y queremos tener más producción".

Por ejemplo, en la cartera estiman que el solo hecho de poner en marcha nuevos hospitales que duplican o triplican la superficie de los recintos a los que reemplazaron -como los de Rancagua y Puerto Montt- aumenta su gasto operacional entre 30% y 75%.

Y aunque en el ministerio trabajan en estrategias para hacer un gasto de recursos más eficiente, la ministra de Salud, Carmen Castillo, aseguró que "vemos que es inevitable que debamos tener una nueva inyección de recursos (desde Hacienda)".

El ex subsecretario de Redes Asistenciales, Luis Castillo, afirmó que las cifras presentadas por el Ministerio de Salud dan cuenta de que las medidas del Gobierno -como la regla de no superar el presupuesto en más del 3% y el pago total de la deuda 2015- "no sirvieron para nada", y que dado el ritmo de crecimiento de la deuda, "es probable que a fin de año lleguemos a alrededor de $360 mil millones", lo que sumado a los $135 mil millones inyectados para pagar la deuda 2015 de los hospitales implicaría un déficit operacional récord.

Según Castillo, los principales problemas de gestión tienen que ver con "el aumento sostenido de compras de camas al sector privado, así como de insumos y medicamentos".

Fuente: Emol.com